Puedes escuchar mil trinos a la salida del sol... danzar con el vaiven de las hojas engalanadas de las palmeras... escuchar es sabio silencio de este ranchon de maderas robustas encaladas en un blanco sucio...o simplemente mirar atento el manto de estrellas brillantes desde el balcón donde se pone el sol... todo ello, bajo la atenta mirada de uno de los más magestuosos Volcanes de la Tierra "El Concepción"... a los pies mismos de su hermano pequeño "El Madera"... como agazapados en su enorme ladera de hojas, arbustos, veredas y petrogrifos, el grupo busca la inspiración dorada que les de un empujón a sus esforzados productos, mientras de reojo mira la cima de esta perforada montaña amiga, que insinuante nos ofrece el reto esperado...
